Charles J. Scicluna es designado por el pontífice para investigar caso: obispo Juan Barros, acusado de haber encubierto abusos sexuales.
"Me llamaron desde la nunciatura del Vaticano para pedirme que testificara", dijo Cruz a la radio chilena "Cooperativa", Cruz, que reside en Filadelfia, Estados Unidos, no podrá viajar a Chile en esa oportunidad, por lo que se le permitió declarar vía Skype ante Scicluna, agregó.
Scicluna investigará en el país sudamericano el caso del actual obispo de la diócesis de la ciudad chilena de Osorno, Juan Barros, a quien las víctimas de Karadima acusan de haber presenciado y encubierto los abusos sexuales del sacerdote. Críticas hacia Barros se multiplicaron después de que estuviera presente en las misas que el papa ofició en el Parque O'Higgins de Santiago, en Temuco, en el sur, así como en Iquique, ciudad del extremo norte del país, en el marco de la gira pastoral que realizó Francisco entre el 15 y el 18 de enero.
"El Papa ha sabido desde siempre la situación de Barros", "El Papa ha sabido desde siempre la situación de Barros. Se lo mandé yo en un carta (en 2015) muy detallada que él recibió en manos del cardenal (estadounidense Sean) O'Malley y confirmado por él mismo", sostuvo Cruz en la conversación con la radio.
"Es una lástima oírlo mentir, que nunca le habían contado nada, que nunca había recibido nada de las víctimas cuando tenía un relato absolutamente detallado de todos los hechos", agregó.
El Papa, en abierta defensa de Barros, declaró en su paso por Chile que el día que le trajeran pruebas iba a hablar. "No hay una sola prueba en contra (de Barros), todo es calumnia", subrayó entonces. Fernando Karadima, de 87 años, por mucho tiempo el párroco de la Iglesia de El Bosque, un acomodado barrio ubicado en el este de la capital Santiago de Chile, fue suspendido por la Iglesia católica de por vida de sus funciones como sacerdote.