El 2017 la cifra de importación de diésel subió al 60%, a pesar de la aprobación de la Ley de Incentivos
“Las soluciones en la que estamos trabajando: primero, explorar para producir crudo nacional, petróleo; segundo, industrializar, plantas de biodiésel, dos plantas con tecnología FAME y una de tecnología HVO y con eso revertir la situación y tener un 80% de producción boliviana y un 20% importado y que este 20% sea eficiente”, afirmó el ejecutivo de YPFB.
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos perfila producir el 80% de diésel con exploración, producción de crudo nacional e industrialización con sustitución de importaciones, informó este domingo el presidente ejecutivo de la estatal petrolera, Armin Dorgathen Tapia.
Dorgathen agregó “el 2021 ingresamos con la exploración de Boquerón que estaba paralizado desde el 2017 que no fue desarrollado por el no pago de incentivos a la producción de petróleo. Comenzamos con la producción en Yarará, el descubrimiento en Yope y la puesta en desarrollo de Boquerón y logramos revertir la curva de producción de petróleo”.
Recordemos, que el 2006 el país comenzó a importar combustibles en un 20%, para ese momento se tuvo que tomar una decisión de contar con una logística armada y no se la hizo. Bolivia cuenta con una planta de importación en Arica que opera YPFB, el resto son alquiladas.
“Con esta tasa llegamos a un 80% de importación de diésel, hoy estamos comenzando a revertir esa curva, a revertir la curva de producción nacional con el objetivo de ir bajando, por lo menos, ir manteniendo el crecimiento de la demanda con la producción nacional y la industrialización. Este es el trabajo que estamos haciendo”, afirmó Armin Dorgathen.
El 2014 el país pasó del 20% al 50%. El dato perfilaba a Bolivia como un país importador. El 2017 la cifra de importación de diésel subió al 60%, a pesar de la aprobación de la Ley de Incentivos, instrumento legal que no cumplió con su objetivo, situación que se traduce en la caída abrupta de la producción de petróleo.