Evitó entrar en más polémicas con Efraín Suárez, asesor de Camacho, quien prácticamente tiene el control de la información y de las personas que visitan al exicívico en Chonchocoro
Vicegobernador Mario Aguilera reveló que mucho antes de que Luis Fernando Camacho sea aprehendido, en diciembre de 2022, fue marginado de las reuniones de gabinete y que ahora la gestión de la Gobernación de Santa Cruz atraviesa por “obvias dificultades”, porque no se pueden tomar decisiones inmediatas en virtud a la detención preventiva que cumple la primera autoridad departamental.
“Nunca estuvimos hombro a hombro con el gobernador", admitió Aguilera en una entrevista con Influyentes de Radio El Deber de Santa Cruz.
De acuerdo con Aguilera, desde que asumió como vicegobernador, en mayo de 2021, empezó a advertir “que había un ambiente complicado”, porque Camacho tampoco lo llamó para formar su gabinete de secretarios, sino que los nombró de manera directa. Luego de ello se generó el distanciamiento. Si bien en las primeras reuniones de gabinete Aguilera participó, poco a poco se lo dejó de convocar.
“Yo no participé de los terceros y cuartos gabinetes, no me invitaron a esos gabinetes, vos dirás ¿por qué? No sé, hay que preguntárselo a otra persona. Participé en el primero y en el segundo”, dijo Aguilera, quien en estos días fue blanco del ataque del entorno de confianza de Camacho que se resiste a que asuma de forma temporal como gobernador.
Pasaron de decirle que podría ser un “gobernador funcional” al MAS, que Camacho “no confía en él" y, por último, le exigieron que se sincere y diga de qué lado está.
Aguilera replicó que no está entre sus pretensiones asumir como gobernador interino y que si ése habría sido su objetivo, la misma tarde del 28 de diciembre, cuando fue aprehendido Camacho, “hubiera ido a demandar ese derecho”.
El también arquitecto y exsegundo vicepresidente del Comité Pro Santa Cruz explicó, además, que no asumió de manera directa la suplencia gubernamental porque la “palabra ausencia no está claramente definida” en el Estatuto y que fue por ello que el 4, 5 y 6 de enero consultó al Legislativo el alcance del artículo 25 de la norma departamental.
“Si uno dice ‘el vicegobernador debió asumir automáticamente’; ¿y si el gobernador firmaba algo? Había duplicidad de autoridad y entrábamos en casos que han sucedido en otras entidades territoriales autónomas, en otras alcaldías donde se congelaron las cuentas hasta que el poder Judicial decida quién estará como autoridad, eso es muy delicado”, argumentó.
Dijo que por ello actuó con “cautela y preguntando” y que al final una decisión judicial le dio la razón al exhorta a la Asamblea Legislativa Departamental a establecer los alcances de la ausencia y de la suplencia gubernamental.
En virtud de ello, el pasado sábado, el legislativo cruceño aprobó la ley departamental para garantizarle a Camacho el ejercicio del cargo desde la cárcel, norma que aún no entra en vigor porque el gobernador no la promulgó.
Evitó entrar en más polémicas con Efraín Suárez, asesor de Camacho, quien prácticamente tiene el control de la información y de las personas que visitan al exicívico en Chonchocoro.
“Si quieres hablar conmigo, ven a hablar conmigo, yo no estoy acostumbrado al lleva y trae y a todas esas cosas, pero al final de cuentas son personas que existen y no debe ser el único, deben haber más”, atinó a decir al aludir a Suárez.
Sobre la gestión de la Gobernación, Aguilera dijo que está pasando por “un momento dificilísimo por las exigencias existentes, porque hay demandas de trabajo que requieren decisiones aceleradas” y no se las da, advirtió que él, pese a ser electo como vicegobernador no tiene la “potestad de mandar” o “hacer algo de emergencia”.