Los resultados se vieron en un crecimiento económico sostenido con indicadores como una inflación controlada y un tipo de cambio invariable, en medio de un contexto externo adverso
Presidente Luis Arce afirmó en un balance de media gestión que su gobierno está firme a “pesar de todos los intentos, internos y externos, de acortar su mandato” y aseguró que la “independencia económica y soberanía política plenas” deben ser resultado del debate y no de la violencia.
“A pesar de todos los intentos, internos y externos, de acortar nuestro mandato y de que nos vaya mal por mezquinos cálculos políticos, aquí estamos, firmes, para seguir cumpliendo nuestros compromisos con el pueblo boliviano, a quien nos debemos”, afirmó.
Arce ganó las elecciones de 2020 con más del 55% de la preferencia electoral, y asumió la Presidencia de Bolivia el 8 de noviembre de ese mismo año, en un momento difícil por la pandemia del Covid-19 y la crisis económica.
De inicio dispuso el pago del Bono contra el Hambre de Bs 1.000 y una serie de acciones económicas para reconstruir la economía que había tocado fondo en el gobierno de facto de Jeanine Áñez. Los resultados se vieron en un crecimiento económico sostenido con indicadores como una inflación controlada y un tipo de cambio invariable, en medio de un contexto externo adverso.
En los dos años y medio de mandato, también enfrentó problemas internos alentados por actores cívicos y políticos de oposición como el paro de 36 días en Santa Cruz por el censo, que estuvo caracterizado por la violencia y muerte de cuatro personas.
“Seguiremos firmes y leales a nuestros principios, trabajando por la unidad y la dignidad de nuestra Patria. Hemos sorteado muchas adversidades, obstáculos internos y externos, pero junto a ustedes, hermanas y hermanos, seguiremos superando todas las adversidades”, aseguró en su mensaje.
“La independencia económica y soberanía política plenas solo se lograrán con el debate de ideas, no con violencia; con la reafirmación de nuestra bolivianidad, con la decisión de profundizar la construcción de nuestro Estado Plurinacional y el amor a nuestra Patria”, afirmó Arce.
La llegada al gobierno de la actual administración fue vista como el triunfo y retorno de la democracia, tras el golpe de Estado de 2019 y las masacres de Sacaba y Senkata que acabaron con más de una treintena de muertes y decenas de heridos de bala.
Arce aseguró que el gobierno logró devolver “al pueblo su ‘ajayu’ que había sido duramente golpeado por un año de convulsión y violencia sistemática” y destacó el fortalecimiento de la democracia intercultural gracias a “la unidad, lucha y conciencia del pueblo”.