Alberto Fernández, señaló que se mantienen las condiciones vigentes del contrato pero con el compromiso adicional de Bolivia de priorizar a Argentina en caso de tener un un incremento en la producción de gas
Presidente de Argentina, Alberto Fernández, recordó este jueves que durante el gobierno transitorio de Jeanine Áñez (2019-2020) su país no tuvo vínculo con Bolivia, que, no obstante, lo recuperó cuando Luis Arce llegó al poder.
“Mientras el gobierno estuvo usurpado por la autodenominada presidenta Áñez, nosotros no tuvimos vínculo con Bolivia; recuperamos el vínculo con la llegada del presidente Arce”, dijo el mandatario argentino durante una conferencia conjunta con el Presidente en Casa Rosada, la sede presidencial argentina en Buenos Aires.
Ambos presidentes se encontraron otra vez, esta vez para la suscripción de una serie de acuerdos bilaterales, entre ellos la compraventa de gas natural.
Fernández, quien fue uno de los primeros políticos en desconocer a Áñez, retiró el embajador de su país en Bolivia y mantuvo en ese papel a un funcionario de segundo nivel solo para cuestiones administrativas.
“En Bolivia hubo un golpe de Estado; espero que no reconozcan el resultado de un golpe de Estado”, advirtió al día siguiente de que Áñez se proclamara presidenta de Bolivia en reemplazo del dimisionario Evo Morales, en 2019.
Este jueves, Fernández recordó lo sucedido aquel año en Bolivia. “Por convicción vimos lo que le había pasado a Evo Morales y desde el primer momento tuvimos la convicción de que el pueblo de Bolivia debía tener derecho a elegir a sus gobernantes”, dijo.
Antes de asumir funciones, en 2019, Fernández invitó a Morales a refugiarse en su país. Entonces, Morales se encontraba refugiado en México, adonde llegó la madrugada del 12 de noviembre de 2019, dos días después de su renuncia.
El 12 diciembre, dos días después de la asunción de Fernández en Argentina, Morales llegó a ese país, donde se instaló y luego organizó las candidaturas de Arce y de David Choquehuanca, del Movimiento Al Socialismo (MAS) con miras a las elecciones de 2020.
En conferencia conjunta de este jueves, Arce fue consultado acerca de la eventual participación de argentinos en la ruptura constitucional de 2019. Aseguró que el caso está en la Justicia, aunque no se refirió explícitamente a las investigaciones judiciales, tanto en Argentina como en Bolivia, que establecieron, al menos, la provisión de armamento antidisturbios por parte del entonces gobierno argentino de Mauricio Macri.
“Se conoce que para ese golpe de Estado hubo, lamentablemente, varios gobiernos que estuvieron en la lógica de apoyar todo lo que ocurrió en nuestro país. Por lo tanto, el Gobierno y el pueblo boliviano están deseosos de avanzar en las investigaciones y de esclarecer todos los hechos que han sucedido en 2019, entre esos está lo que usted mencionó”, dijo Arce al periodista.
También se reunieron para tocar otros temas en Casa Rosada de Buenos Aires, en un encuentro en que abordaron temas como la provisión de gas, la situación en Perú con las protestas contra Pedro Castillo, el litio, entre otros.
El tema del gas está en agenda entre ambos países, puesto que se estaba negociando el contrato de provisión. El presidente Luis Arce señaló que con los acuerdos se busca poner fin a la “incertidumbre” y “turbulencias”, que se pudieron generar por llegar a una solución más temprana.
“Creo que con esto Argentina tiene garantizado el suministro, como lo hicimos el año pasado, de gas”, aseveró el presidente boliviano. Sin entrar en detalle, el mandatario argentino, Alberto Fernández, señaló que se mantienen las condiciones vigentes del contrato, pero con el compromiso adicional de Bolivia de priorizar a Argentina en caso de tener un un incremento en la producción de gas.
“Nosotros celebramos poder contar con ese gas seguro, porque la realidad es que Bolivia ha demostrado en los últimos años el decline de la producción de gas, producto de la falta de inversión básicamente ocurrida durante el gobierno precisamente de facto, y eso es algo que Bolivia está intentando recuperar”, dijo Fernández.
Arce indicó que se está haciendo un esfuerzo para mantener los niveles de la gestión pasada en términos del gas que se suministra a la República Argentina y, asimismo, confirmó el compromiso de que la producción adicional tiene prioridad para ese país.
Reveló también que Bolivia está negociando su contrato con Brasil, puesto que la adenda firmada durante el gobierno anterior sería contraria a los intereses bolivianos.
Arce reveló también que en la reunión ambos mandatarios expresaron su preocupación por la situación en Perú, donde el presidente Pedro Castillo enfrenta protestas sociales con saldo de personas fallecidas.
“Se quiere arrancar en las calles lo que no se ganó en las urnas por parte de la derecha peruana, lamentamos ese hecho. Yo creo que hay que respetar la democracia, hay que respetar el voto popular del pueblo peruano que decidió por una opción y evidentemente lamentamos que haya algunos atisbos que vayan en contra de esta democracia”, dijo el mandatario boliviano.
Fernández dijo que los sucesos de Perú deben llamar la atención de todos los líderes latinoamericanos, puesto que sería un “intento de destituir al presidente Castillo”. Llamó a que la comunidad de gobiernos democráticos de América Latina puedan pronunciarse en favor de preservar la institucionalidad del Perú.