Theodorakis fué muy activo a favor de las relaciones entre Grecia y Turquía, contrario a la guerra de Irak, y contrario a las medidas de austeridad que conllevaban los rescates de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional
Compositor y activista político Mikis Theorodakis ha fallecido en Atenas a los 96 años. El músico no sólo dio a conocer al mundo entero la música griega, comenzando por la banda sonora de la película 'Zorba, el Griego', sino que ayudó al país con su lucha contra la dictadura de los coroneles (entre 1967 y 1971) desde Grecia y posteriormente desde su exilio.
«Hoy perdimos parte de alma de Grecia», dijo la ministra de Cultura, Lina Mendoni, añadiendo que «ha sido quien hizo que los griegos cantaran poesías». Eso sí, se seguirá lo que el propio Theodorakis pidió al Secretario General del Partido Comunista Griego: «Que se respete no sólo mi ideología, sino mi lucha para la unión de los griegos». Añadió que quería «dejar este mundo como un comunista». Theodorakis será enterrado en el pueblo de Galatá, cerca de Janiá (Creta) dónde nació su padre.
Nada más conocerse la noticia, el primer ministro griego Kiriakos Mitsotakis comenzó la reunión del Consejo de Ministros, tras la remodelación de su Gobierno, anunciando que «todo el pueblo griego llora, todos nos habíamos olvidado de que era mortal». El mandatario griego dijo que Theodorakis deja como legado sus canciones, su acción política, pero también su aportación nacional en momentos críticos. Porque nadie olvida que además de ser un hombre de izquierdas, muy cercano al Partido Comunista Griego, luchó en la resistencia contra las fuerzas italianas y alemanas durante la Segunda Guerra Mundial, llegando a salvar a familias judías.
Durante la guerra civil fue arrestado y exilado a la isla de Icaria y posteriormente enviado a la isla de Makronisos. Hizo lo mismo durante la dictadura de los coroneles, durante la que organizó la resistencia y llegó a estar en la cárcel, siendo desterrado después y consiguiendo exiliarse en Francia. Con el regreso de la democracia, Theodorakis volvió a Grecia. Fue dos veces diputado comunista (entre 1981 y 1990) y posteriormente candidato independiente, llegando a ser ministro de Cultura durante un Gobierno entre conservadores y comunistas presidido por Constantino Mitsotakis, el padre del actual primer ministro, dejando este cargo en 1992.
Theodorakis fue también muy activo a favor de mejorar las relaciones entre Grecia y Turquía, contrario a la guerra de Irak, y durante los años de la crisis ferozmente contrario a las medidas de austeridad que conllevaban los rescates de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional. Apoyó claramente al partido radical de Alexis Tsipras hasta que formó Gobierno. Posteriormente, se arrepintió de este apoyo viendo las decisiones que tomó el Gobierno radical, que llevaron a un tercer rescate.
En los últimos años, la salud de Theodorakis se deterioró y sus apariciones públicas fueron disminuyendo. Murió en su domicilio de un paro cardiaco y su hija Margarita, que siempre estuvo a su lado, declaró: «Era un hombre muy bueno, un hombre excepcional».
El mundo de la Cultura y las Artes en Grecia recuerda hoy que Mikis Theodorakis era además un hombre generoso, que ayudaba a los jóvenes, que 'regalaba' su tiempo dando consejos y oportunidades a otros músicos y artistas.
Mijalis Theodorakis, al que en Grecia se conocía y se conocerá por su apodo, 'Mikis', nació en la isla de Jíos en 1925. Estudió primero en varias ciudades (su padre era funcionario y fue destinado en distintos lugares ) y posteriormente en el Conservatorio de Atenas, entre 1943 y 1950. Para él, su patria era Creta, de donde provenía la familia de su padre. Y por ello fue en Creta donde dirigió la Escuela Musical de Janiá y fundó su primera orquesta.
Entró en 1954 en el Conservatorio de París, estudiando análisis musical con Olivier Messiaen y dirección de orquesta con Eugène Bigot. A partir de entonces, Theodorakis comenzó a escribir sus obras sinfónicas, conciertos y música para ballet.
Sus obras más conocidas se basan en poesías griegas y en poemas de Pablo Neruda (como su 'Canto General') y García Lorca (en su obra 'Lorca', basada en el 'Romancero Gitano'). Muchas de sus composiciones se convirtieron en himnos de la izquierda internacional. Pero también sus sinfonías y su música para películas conquistó a un público que no entendía de política, pero sí de sentimientos. No es casualidad que su banda sonora para la película 'Zorba, el griego' (1964) siga siendo un éxito internacional, y eso que la compuso hace muchas décadas, mientras que otras de sus canciones fueron interpretadas por Édith Piaf, Shirley Basses y los Beatles.
También tuvieron mucho éxito sus composiciones para la película 'Z', de Costa-Gavras (premio BAFTA ), o para 'Fedra' (1962) y 'Serpico' (1972), por la que fue nominado a un Grammy en 1975.
Fundamental en la historia de la música griega han sido sus composiciones musicales conocidas como 'Trilogía de Mauthausen', basadas en los poemas del autor griego Iakovos Kambanelis, que sobrevivió tras estar internado en este campo de concentración.
Theodorakis compuso innumerables obras sinfónicas y rapsodias, música de cámara, oratorios y cantatas, además de música para bailes y ballets, como las 'Siete danzas griegas' con coreografía de Maurice Béjart y 'Zorba, el Griego', con coreografía de Lorca Massine. Y hay que añadir su música para óperas, tragedias, películas... Y muchos libros: sobre la música griega, sobre su trayectoria comunista, sobre las artes, sobre política... Todo ello además de sus cualidades de director de orquesta y músico capaz de tocar varios instrumentos.