Ministro Romero: ?Este tema ha sido tan perversamente deformado, en algunas redes sociales se han dicho tantas cosas. Todos los documentos de las redes sociales los estoy remitiendo, en condición de víctima, judicialmente para una profunda investigación y aquellos que han escrito anónimos también estoy enviando al Ministerio Público, con la identificación de los anónimos aseveró
Fiscal departamental, William Alave, indicó que la denuncia fue sentada la semana pasada y que se está procediendo a la notificación de cuatro personas que viven en La Paz. Aclaró, según publica Erbol, que son civiles y no políticos.
en el programa televisivo estatal “El pueblo es noticia”, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, se declaraba víctima de ataques en las redes sociales por el escándalo que se desató luego de que fueran de conocimiento público los nexos del narcotraficante Pedro Montenegro con jefes policiales y autoridades del poder judicial. Hoy, lunes, el fiscal de La Paz, William Alave, confirmó que ya inició investigaciones a cuatro personas.
Así, el domingo Romero se declaraba afectado por el caso: “Este tema ha sido tan perversamente deformado, en algunas redes sociales se han dicho tantas cosas. Todos los documentos de las redes sociales los estoy remitiendo, en condición de víctima, judicialmente para una profunda investigación y aquellos que han escrito anónimos también estoy enviando al Ministerio Público, con la identificación de los anónimos, afortunadamente. Se ha hecho un trabajo de peritaje, a través de detección informática, y se ha podido dar en muchos casos con anónimos que han escrito muchísimas cosas de descalificación en este tiempo".
Los nexos de Montenegro salieron a la luz pública, por primera vez, el 17 de abril cuando se publicaron fotografías en las que el narco aparecía sonriente en medio de un grupo de 18 personas, que viajó en marzo de este año a Cartagena, Colombia. Entre los que lo rodeaban se encontraban dos jefes policiales y el hijo del entonces director de la Felcc Santa Cruz, Gonzalo Medina. También se supo que el tour carnavalero fue auspiciado por el capo de la droga.
Desde entonces hasta el pasado sábado, cuando se entregó Pedro a la Policía, el país ha visto con indignación cómo el narco –que era requerido por la justicia de Brasil desde 2015 por tráfico de drogas– convivía con el poder. Lo último que se supo es que celebró su cumpleaños 38 rodeado de jefes policiales, jueces y autoridades del poder judicial.
Esto desató airadas críticas y fue en las redes sociales donde muchos bolivianos expresaron en distintos tonos su pesar. Al ser Carlos Romero el ministro de Gobierno, cartera de la que depende la institución verde olivo, los dardos también apuntaron a él.
Por esas “tantas cosas” que se han dicho en las redes sociales es que el ministro decidió actuar. El fiscal departamental, William Alave, indicó que la denuncia fue sentada la semana pasada y que se está procediendo a la notificación de cuatro personas que viven en La Paz. Aclaró, según publica Erbol, que son civiles y no políticos.
Agregó también que serán procesados por “delitos informáticos y delitos contra la dignidad de las personas”, que no superan los tres años de pena, el rechazo a la decisión de Romero no se hizo esperar y fue justo en el escenario donde el ministro identificó a sus detractores, las redes sociales, donde los usuarios se manifestaron.
La diputada demócrata Eliane Capobianco dijo que es llamativo que el ministro de Gobierno esté más preocupado por las críticas a su persona en las redes sociales que por investigar lo que sucede con la infiltración del narcotráfico en la Policía Boliviana.
"Toda Bolivia está indignada de ver cómo la Policía fue penetrada por el narcotráfico (...). Esto es lo que debería preocupar al ministro. Debería ocuparse de esta situación y dejar de estar amenazando a la ciudadanía", manifestó la legisladora. Otro que se manifestó al respecto, fue el político opositor Samuel Doria Medina. “Ministro Romero en vez de dedicarse a controlar las redes sociales dedíquese a controlar a la Policía. Su trabajo es perseguir narcotraficantes, no asediar a los internautas”, escribió en su cuenta de la red social Twitter