Doria Medina es identificado como uno de los representantes del neoliberalismo de su época, privatizó y capitalizó las empresas del Estado
“He hablado con Goni, sí. También lo he hecho con (el exvicepresidente Álvaro) García Linera (por mencionar a alguien del MAS). Debatí con Richter y con María Galindo, traté de visitar a Jeanine y Camacho en la cárcel”, alegó el empresario en un mensaje en su cuenta de Twitter.
“He hablado con Goni, sí”, respondió este jueves el empresarios y exjefe de Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina, luego que Mauricio Balcázar revelara hace unos días que éste se reunió con el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada en Washington, Estados Unidos, y que, además, pedía reunirse con él.
Ex presidente es identificado como uno de los representantes del neoliberalismo de su época. Privatizó y capitalizó las empresas del Estado, que en el gobierno del MAS fueron recuperadas con el retorno de una administración con fuerte presencia del Estado y redistribución de la riqueza.
Argumentó que sólo “en Bolivia reunirse con uno que no sea correligionario puede considerarse un problema” y al dirigirse a Balcázar, yerno y vocero de Sánchez de Lozada, agregó: “Curioso: el yerno supone que reunirse con su suegro es malo para mi reputación. Con esos yernos…”.
Con el fin de defender la propuesta de nueva Constitución que hizo el expresidente, Balcázar tuvo espacio en varios medios de comunicación del país por los cuales, además de criticar el rol de los opositores, reveló que varios políticos nacionales mantuvieron contacto con Sánchez de Lozada con llamadas, e incluso lo visitaron en Washington.
Balcázar mencionó a Doria Medina, Ronald MacLean, exasesor de Luis Fernando Camacho, incluso diputados y senadores y un expresidente, de quien no dijo el nombre.
Los enumeró luego de que, en una entrevista con el programa No Mentirás, se le leyera la respuesta de Doria Medina a la propuesta de Sánchez de Lozada de aprobar una nueva Constitución con el fin de crear la figura de primer ministro y limitar los poderes del presidente.
“Mi respuesta a El Deber sobre la propuesta de Goni: ‘Busca que se mencione esta idea en la última página de su biografía. Su contenido no merece comentario: una persona que está 20 años ausente no considera la realidad y cree erradamente que la ley cambiará la sociedad’”, escribió Doria Medina en su Twitter.
En la entrevista, Balcázar replicó: “Al menos no ha hecho un TikTok para respondernos, pero no, lo único que puedo preguntarle (a Doria Medina) es ¿cuándo fue la última vez que pidió ir a ver a Goni?”.
“¿Cuándo fue?”, inquirió la presentadora a lo que Balcázar contestó: “que él (Doria Medina) conteste”.
“Yo no quiero entrar, yo he estado en la reunión, pero no quiero entrar en eso. La oposición puede tener muchos defectos, pero por lo menos está ahí y negocia su estadía”, dijo al tratar de cerrar el tema, pero la presentadora insistió en su indignación sobre dónde y cuándo fue el encuentro.
“En Washington”, apuntó Balcázar y agregó: “si yo le hago la lista de la gente que ha venido a hablar con Goni, creo que no termino”.
Trató de matizar con que esas reuniones no “tienen importancia” e insistió en que hay “mucha gente que lo ha visitado, un expresidente, diputados y senadores”.
“Nunca se ha tratado de negociar algo, simplemente querían ver y saber qué opinaba y mantuvo silencio porque es un pecado hacer eso en Bolivia”, agregó.
Cuando se le preguntó si Carlos Mesa, exvicepresidente de Sánchez de Lozada, fue a verlo o pidió hablar con el exmandatario, Balcázar dijo que “Carlos Mesa es una historia muy especial”.
“¿Fue Tuto Quiroga el expresidente que visitó a Goni?” se le preguntó a Balcázar, pero él optó por guardar silencio: “No voy a hablar más, no (se ríe), usted (al dirigirse a la presentadora) ya me jaló la lengua, pero no tienen trascendencia esas reuniones que ha tenido, unos han venido a pedir opinión, otros han venido a pedir ayuda, otros simplemente por curiosidad”.
Sánchez de Lozada se encuentra en Estados Unidos desde 2003, adonde huyó tras los hechos de violencia y muerte que provocaron su renuncia y huida.
expresidente y prófugo de la justicia Gonzalo Sánchez de Lozada mantuvo contacto con actores políticos del país, como el empresario Samuel Doria Medina, Ronald MacLean, el exasesor de Luis Fernando Camacho.
Mauricio Balcázar, yerno y vocero del exmandatario, sostuvo que además de estas personas hay diputados, senadores y un expresidente que siempre lo llaman.
“Él (Sánchez de Lozada) habla cada semana, desde hace 20 años, con dos o tres personas, él llama o le llaman”, comentó Balcázar al explicar que Sánchez de Lozada está al tanto de lo que pasa en Bolivia.
“Está bien informado”, insistió al defender la propuesta que hizo el expresidente para reformar la Constitución ante quienes lo definieron como “congelado en el tiempo” y “fosilizado” por proponer la creación de un primer ministro y que se elija a un presidente con poderes limitados.
Incluso Balcázar, de acuerdo con la Agencia Boliviana de Información, propuso que para verificar que el exmandatario se encuentra “lúcido” y “muy bien” se le pregunte a “Roni MacLean, porque él habla por teléfono con Sánchez de Lozada e incluso lo visita”.
Entre los Datos MacLean fue alcalde de La Paz. Elegido en 1985, fue reelegido cuatro veces hasta 1997.
Luego de mantener una activa participación en la administración estatal —en carteras como Planificación, Relaciones Exteriores, Portavoz del Gobierno, Finanzas y Desarrollo Sostenible y jubilarse como funcionario del Banco Mundial— volvió al escenario político nacional de la mano del excívico Luis Fernando Camacho, luego de la crisis social de 2019.
MacLean se presentó como “director general de la campaña presidencial de Luis Fernando Camacho”, en noviembre de 2019.
Si bien elogió a Camacho como “un joven líder cívico que se jugó la vida persiguiendo al exmandatario Evo Morales hasta su suntuoso palacio vacío”, el exalcalde decidió dejarlo en septiembre de 2020.
El empresario Doria Medina también era otro de los actores de la política criolla que mantenía contacto con el expresidente que fugó a Estados Unidos luego de la represión que ordenó en octubre de 2003 y causó más de 60 muertos y más de 400 heridos.
“En Washington —apuntó Balcázar— si yo le hago la lista de la gente que ha venido a hablar con Goni, creo que no termino”.
Trató de matizar con que esas reuniones no “tienen importancia” e insistió en que hay “mucha gente que lo ha visitado, un expresidente, diputados y senadores”.