La desilusión se notó en el mismo Estadio Nacional, donde un sector del público coreó el nombre de Lady Gaga, que pelea por arrebatarle a Madonna la corona de "reina del pop".
Según el diario La Tercera, los casi 40.000 asistentes aguantaron con resignación la demora bajo una intensa lluvia y un frío poco habitual para esta época del año en el país austral. El público silbó en repetidas ocasiones y coreó el nombre de Lady Gaga, hasta que la artista salió el escenario.
Tras la espera, los asistentes se encontraron con un formato distinto al de los otros conciertos de la gira, en el que la primera parte fue recortada en aproximadamente media hora. Según señaló la productora que trajo la artista a Chile, se decidió quitar el primer acto del concierto porque el montaje que se había instalado en el escenario estaba resbaladizo y suponía un riesgo para los bailarines que acompañaban a Madonna.
El diario La Tercera sostiene que esta gira de Madonna es "notoriamente menos espectacular, de ritmo más trabado y abundancia de discursos" si se compara con la primera aparición de la cantante en Chile, en 2008. El rotativo El Mercurio, en tanto, reseña la "sensación de inconformidad" de los fanáticos chilenos de la artista, que "se tragaron la espera, la lluvia, un show más corto y a una diva más endeble".
La red social Twitter fue la herramienta que utilizaron miles de seguidores para mostrar su disconformidad con el espectáculo de la estadounidense. Madonna se convirtió rápidamente en "trending topic" (tema del momento) y sus fans se quejaban por la larga espera e incluso pedían que se les devolviera el dinero de la entrada. La artista pondrá el punto y final a su gira con una actuación en la ciudad argentina de Córdoba el próximo sábado.