Bolivia impetró en 2013 una demanda contra Chile ante la CIJ para que cumpla los ofrecimientos hechos a lo largo de la historia de negociar una salida soberana al océano Pacífico, que le arrebató tras una invasión y guerra en 1879
Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) dará a conocer el 1 de octubre su fallo sobre la demanda en la que Bolivia pretende obligar a Chile a negociar una salida al mar, un centenario diferendo que mantiene congeladas las relaciones entre ambos países. La CIJ comunicó que la sentencia sobre el caso 'Obligación de Negociar un Acceso al Océano Pacífico' entre Bolivia y Chile será presentada en “la audiencia que tendrá lugar el lunes 1 de octubre de 2018, en el Palacio de la Paz, La Haya”, según la cancillería chilena.
Las autoridades bolivianas presentaron en 2013 la demanda ante la CIJ luego de fracasadas todas las negociaciones que por décadas ha llevado adelante con Chile para que establezca “la obligación de negociar de buena fe con Bolivia un acuerdo pronto y efectivo que le otorgue una salida plenamente soberana al océano Pacifico”. Bolivia perdió sus únicos 400 km de costa en la Guerra del Pacífico de 1879-1883 que libró junto a Perú contra Chile.
Chile sostiene que el Tratado de Paz de 1904 definió las fronteras de mutuo acuerdo y que la más alta instancia judicial de la ONU no le puede obligar a ceder ni soberanía ni territorio. “Hemos y vamos a seguir defendiendo con todos los instrumentos de la historia y del derecho internacional nuestra integridad territorial, nuestro mar, nuestra soberanía”, afirmó el presidente Sebastián Piñera.
En Bolivia, el presidente Evo Morales espera que el fallo permita finiquitar “temas pendientes” entre “países vecinos y hermanos” y manifestó su confianza en que la CIJ apoye el argumento de que Chile ha ofrecido resolver la demanda boliviana en varias negociaciones registradas en el pasado. “La Corte debe invocarnos a un diálogo, a una negociación de buena fe sobre todos los temas ofrecidos por Chile durante casi un siglo”, sostuvo Morales. Por su parte, el gobierno chileno realizará un “proceso de coordinación y consulta” a nivel político e institucional y espera “la unidad de todos los chilenos en torno a la defensa de lo que son los intereses de nuestro país”, sostuvo el canciller Roberto Ampuero.
Chile reconoce a Bolivia el derecho de tránsito comercial sobre puertos chilenos en el Pacífico así como el uso gratuito de sus instalaciones y arancel cero para sus exportaciones e importaciones. Según las autoridades locales, el 80% de la mercancía que pasa por el puerto chileno de Arica, fronterizo con los dos países, es boliviana. Tenso proceso judicial En marzo pasado concluyeron los alegatos orales presentados por las representaciones de ambos países ante los jueces de la CIJ luego de casi cinco años de un proceso que ha tensionado aún más las relaciones entre los dos países que desde 1978 mantienen relaciones sólo a nivel consular.
Para Bolivia fue un triunfo llevar el caso ante la CIJ, tribunal que escuchó sus acusaciones y críticas hacia Chile al que señala como el responsable de mantenerla enclaustrada por más de 100 años, alegando que esta situación ha provocado daños económicos irreparables y ha impedido el progreso de sus industrias. Bolivia obtuvo su primera victoria en la CIJ en septiembre de 2015, cuando la Corte resolvió que tenía competencia sobre la demanda, pese a la objeción preliminar de Chile.
Presidente boliviano, Evo Morales, afirmó el miércoles que a partir del 1 de octubre de este año habrá una nueva historia para Bolivia y Chile, en alusión al anuncio de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, que fijó para ese día la lectura del fallo sobre la demanda marítima boliviana planteada a ese alto tribunal en 2013.
En una conferencia de prensa, dictada en la Gobernación de Cochabamba, Morales dijo que Bolivia "tiene mucha esperanza y mucha fe" en su demanda que, aseguró, está fundada en la verdad y el derecho internacional.
"A partir del primero de octubre habrá una nueva historia para Bolivia y Chile, serán las nuevas relaciones diplomáticas, para que los acuerdos se cumplan y a partir del 1 de octubre de este año pues empezar a resolver temas pendientes con Chile, porque somos países vecinos y hermanos de por vida y no pueden quedar temas pendientes", puntualizó el mandatario boliviano.
Bolivia impetró en 2013 una demanda contra Chile ante la CIJ para que cumpla los ofrecimientos hechos a lo largo de la historia de negociar una salida soberana al océano Pacífico, que le arrebató tras una invasión y guerra en 1879.
Presidente Evo Morales dijo que "la Corte debe invocarnos a un diálogo a una negociación de buena fe sobre todos los temas ofrecidos por Chile durante casi un siglo, acuerdos -en algunos momentos- no cumplidos, ofrecimientos y ofertas por parte de Chile, pero también resoluciones de la OEA", complementó.
Morales dijo que Bolivia estará pendiente de ese falló, "al igual que Chile, Latinoamérica y el mundo", tomando en cuenta que será emitido por un tribunal de justicia de las Naciones Unidas creado para resolver temas pendientes entre Estados. "La Corte Internacional de Justicia siempre es una esperanza para resolver los temas pendientes entre Estados parte de las Naciones Unidas", refrendó.
Si bien esa resolución fue mero trámite, La Paz la consideró un éxito que reveló la debilidad de Santiago en el proceso, pues el fallo del tribunal fue de 14 votos contra 2. Ambos países tienen todavía otro contencioso vigente en La Haya. En 2016, Chile presentó una demanda contra Bolivia ante la CIJ por las aguas del Silala cuyos derechos de aguas son compartidos, según la visión chilena. El pasado 31 de agosto, el presidente boliviano Evo Morales anunció una contrademanda por el Silala al que La Paz considera un manantial y Santiago un río internacional.