Ayotzinapa uno de los casos por los que el gobierno de Peña Nieto ha sido duramente cuestionado a nivel internacional por la forma en la que se ha realizado la investigación y por las conclusiones que se han dado a conocer a la opinión pública
Presidente de México, Enrique Peña Nieto aseguró que tanto elementos científicos como de inteligencia apuntan a que los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa fueron desaparecidos e incinerados por el crimen organizado, conclusión que en distintas ocasiones ha sido rechazada por los padres y organismos internacionales.
Durante una entrevista con la cadena Televisa, Peña Nieto aseguró que la desaparición de los estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, el 26 de septiembre de 2014 en el municipio de Iguala, es uno de los eventos que marcará su administración.
"Todos los elementos de investigación concluyen en lo mismo, incluso, información reciente conocida por los padres y por quienes están dando seguimiento a este caso saben de labores de inteligencia del gobierno norteamericano que detecta llamadas de un grupo delincuencial que operaba en Chicago que tenía vínculo con el grupo delincuencial en México donde se confirma qué hicieron con los estudiantes: 'los quemamos en el basurero'", dijo.
Ayotzinapa ha sido uno de los casos por los que el gobierno de Peña Nieto ha sido duramente cuestionado a nivel internacional por la forma en la que se ha realizado la investigación y por las conclusiones que se han dado a conocer a la opinión pública.
Los normalistas desaparecieron luego de haber secuestrado unos buses (una práctica común entre universitarios que siempre terminan regresando las unidades) en la terminal de Iguala, en los que se trasladarían a una manifestación en Ciudad de México, pero fueron atacados por policías municipales, que presuntamente los entregaron al cártel de Guerreros Unidos, que los habría asesinado e incinerado en el basurero de Cocula, unos kilómetros delante de Iguala.
"Me queda la pena que embarga a los padres por el dolor que tuvieron y que siguen teniendo todos estos años en demanda de justicia y en demanda de saber qué deparó a sus hijos. Yo espero que recuperen paz y tranquilidad en su interior y más allá de dudas y cuestionamientos me queda, yo me quedo en la convicción de que muy lamentablemente el crimen organizado, que ha permeado muchas de las esferas de actuación de los gobiernos municipales, tuvieron que ver en la desaparición y en lo que fue el que hayan sido quemados en este basurero", expresó Peña Nieto.
En enero de 2015, el entonces fiscal federal, Jesús Murillo Karam, dio a conocer que según las investigaciones oficiales, ésa era "la verdad histórica" que estaba sustentada en fotografías aéreas e información de peritajes realizados tanto por expertos de la Fiscalía como por investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La versión inmediatamente fue rechazada por los padres de los normalistas y por otros investigadores en fuego, por lo que se nombró a un Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para coadyuvar en las investigaciones.
Una de las conclusiones del GIEI fue una que no hubo un incendió en el basurero, pero también señaló a Iguala como un lugar muy importante para el tráfico de heroína y que se transportaba a través de buses de pasajeros y que tenía como destino Chicago, en Estados Unidos.
Las versión oficial señalaba el secuestro de cuatro buses, sin embargo, el GIEI destacó la existencia de un quinto que los estudiantes pudieron haber tomado por error, sin saber que estaba cargado con droga de Guerreros Unidos.
El grupo abandonó México ante la falta de garantías para realizar su trabajo y de acceso a documentos determinantes para la investigación.
En abril de este año, el diario Reforma publicó que conversaciones y mensajes telefónicas de integrantes de Guerreros Unidos (GU) detenidos en Estados Unidos revelaron una comunicación especialmente "intensa" entre el 24 de septiembre y el 24 de octubre de 2014, en las que domina la confusión.
"Los integrantes de GU creían que un grupo del grupo criminal Los Rojos (un cártel rival), enviados por Santiago Mazari, 'El Carrete', pretendía tomar la plaza de Iguala y supusieron que la movilización de los estudiantes normalistas de Ayotzinapa, -quienes pasaban por Iguala para ir a la manifestación del 2 de octubre en Ciudad de México- era parte de la operación rival", informó Reforma.
Los datos disponibles destacan que una de las conversaciones que aportan nuevas pistas sobre lo que aconteció el 26 de septiembre de 2014, es de "Silver", uno de los jefes de Guerreros Unidos (testigo protegido en EEUU), quien preguntó "cómo van las cosas" y después ordenó esa noche cerrar las entradas a Iguala.
"Silver" recibió un reporte de un personaje identificado como "Aníbal", que le informó sobre cómo se salió de control el operativo contra el grupo rival: "Solo que llevaban 60 paquetes ya guardados (personas detenidas-desaparecidas) y otros con San Pedro (asesinados)de aquellos y solo heridos de este lado, incluyendo la sirvienta de 'El Oso'".
El gobierno mexicano tiene presos a una serie de policías y sicarios y al ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, y a su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, a quienes señaló en un primer momento como posibles responsables de la desaparición de los normalistas.
El 4 de junio, Tribunal Colegiado en México ordenó la creación de una Comisión para la Verdad y la Justicia en el Caso Iguala, tras concluir que los acusados por la desaparición de los normalistas fueron torturados por la Fiscalía Federal.