Lula se autoproclama perseguido político e indignado por la condena que le fue impuesta en su opinión sin pruebas como por su encarcelamiento
Reiterando continua de su inocencia, con todos losrecursos presentados ante la justicia para su liberación negadosy con los más altos índices de popularidad para las elecciones presidenciales de octubre, el exmandatario de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva cumple este lunes un mes de prisión.
El sábado 7 de abril, luego de hacer esperar durante dos días a las autoridades, cuando recién había caído la noche y en medio de decenas de militantes, Lula abandonó la sede del sindicato de los Metalúrgicos en Sao Bernardo do Campo para entregarse a la Policía Federal y comenzar así a cumplir una condena de 12 años y un mes de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero.
El exmandatario (2003-2010), recluido desde ese mismo día en una celda de la Policía Federal en la ciudad de Curitiba, fue encontrado culpable de corrupción acusado de recibir un apartamento de tres pisos por parte de la constructora OAS.
Lula no está solo. Desde el día de su reclusión decenas demilitantes lo acompañan en un campamento montado en cercanías de la sede de la Policía Federal en Curitiba, donde permanece en una celda de 15 metros cuadrados que fue acoplada especialmente para él.
El campamento, que se ha convertido en un problema para las autoridades de Curitiba, sufrió hace dos semanas un ataque a tiros en el que resultaron heridas dos personas, una de ellas de gravedad.
La militancia del campamento "Lula Libre" insiste en que se mantendrá en Curitiba hasta el día en que el exmandatario sea liberado y desde allí sus seguidores le siguen enviando a diario y con la ayuda de parlantes, los mensajes que no pueden decirle en persona debido a las fuertes restricciones que la justicia ha impuesto para sus visitas.
Salvo sus abogados y su familia, que pueden visitarlo todos los miércoles, políticos y amigos del expresidente han intentado infructuosamente visitarlo en su celda y solo hasta la semana pasada lograron el permiso de las autoridades judiciales la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffman y el exgobernador de Bahía por el PT y amigo personal de Lula Jaques Wagner.
Premio Nobel de Paz, el activista argentino Adolfo Pérez Equivel, ni la expresidenta Dilma Roussef, ni los políticos amigos y los nueve gobernadores que llegaron desde sus estados especialmente a visitarlo a los pocos días de estar preso, pudieron encontrarse con Lula en su celda.
Se trata de un caso asociado al escándalo de corrupción en Petrobras y por el que el juez Sergio Moro lo condenó a 9 años y medio de prisión, pena que fue elevada en segunda instancia, a 12 años y un mes, por los tres jueces de la octava sala del Tribunal Regional Federal de la cuarta Región de la ciudad de Porto Alegre.
Según un periodista de la revista Veja que al parecer tuvo acceso a zonas restringidas del lugar donde está preso Lula, "El cliente", como lo llaman sus custodios, se levanta todos los días a las 07.00 hora local (10.00 horas GMT) y desayuna un café negro con pan y mantequilla mientras ve noticieros en el televisor de su celda.
Según el artículo, pese a permanecer en soledad en su celda,Lula tiene privilegios frente a los otros 20 reclusos que están en las instalaciones como el no tener que seguir los horarios para levantarse y acostarse o para recibir los baños diarios de sol.