Normalmente cuando visitas una página web la dirección comienza con tres letras: WWW, son las siglas de World Wide Web (o web)
Este martes 12 de marzo es el 30 aniversario de internet. Pues bien, no lo es. Es el cumpleaños de la web. Y no son la misma cosa. Mucha gente confunde la web con internet. Pero internet ya existía antes que la web.
Normalmente, cuando visitas una página web, la dirección comienza con tres letras: WWW. Son las siglas de World Wide Web (o web). Existe desde 1989, cuando un físico del CERN (Centro Europeo de Física Nuclear) llamado Sir Tim Berners-Lee presentó su primera propuesta para la web, un invento que cambiaría el mundo por completo.
En septiembre de 1990 llegaron las computadoras, y en la Navidad de ese año la World Wide Web ya estaba completamente viva y activa. Eso fue posible gracias a un invento anterior: internet.
Internet es una inmensa red de computadoras alrededor de todo el mundo conectadas entre sí, la web (la World Wide Web) es una enorme colección de páginas que se asienta sobreesa red de computadoras.
Así que cuando navegas a través de tu celular o computadora usas internet para acceder a la web, aunque internet ya existía antes nadie antes había desarrollado una forma conectar la internet con todos los documentos y datos que ahora hay en ella.
Berners-Lee encontró un sistema eficiente de usar esas conexiones creando páginas web para compartir información.
En cierto modo internet equivaldría a la infraestructura —las carreteras de países de todo el mundo— mientras que el contenido de las páginas web es los que viajan sobre esa infraestructura —los autos, camiones, autobuses— que transportan información.
Las tiendas, las empresas, los cafés... que se asientan sobre esas vías para que los ciudadanos (los internautas) puedan entrar en las páginas web serían los servidores que las alojan.
Si no existiera internet, nadie podría comunicarse a través de la World Wide Web porque no habría manera de enviar esos datos.
Y sin la World Wide Web, la mayoría de nosotros encontraríamos extremadamente difícil (y mucho más costoso) acceder a toda la información que tenemos disponible hoy día.