"El enemigo principal no se encuentra en nuestras filas sino en esa derecha fascista que no cesa en sus intentos de volver a tomar el poder por vías no democráticas para retornar a la república colonial y al modelo neoliberal de saqueo de nuestro Estado" afirmaron
Ministra de la Presidencia, María Nela Prada, junto al presidente de Diputados, Jerges Mercado, y la diputada Virginia Velasco, leyó en una conferencia de prensa las 10 conclusiones a las que arribaron en una reunión de cerca de 10 horas en La Paz, para tratar temas políticas, de gestión y de coordinación destinados a mejorar la respuesta a la población.
Reunión ampliada de gabinete entre el presidente Luis Arce y la Bancada Legislativa Nacional del MAS reafirmó este sábado que la actual administración es “un gobierno del MAS” y rechazó intentos internos y externos de desestabilización y de “desgaste de la gestión” con denuncias de corrupción y narcotráfico que pretenden –denunció- “etiquetar a todos como culpables de delitos”.
“Nuestro presidente tiene esta dinámica de generar espacios de diálogo, de retroalimentación, de crítica y autocrítica que por supuesto son importantes en el marco del fortalecimiento de nuestra política interna y de nuestra gestión como gobierno de manera conjunta con nuestros compañeros del Órgano Legislativo”, insistió. Prada recordó que no es la primera reunión de este tipo en el afán de fortalecer la coordinación entre poderes para mejorar la gestión en beneficio de la población.
En el primer punto, se fijó una posición y mensaje político: “El gobierno nacional, a la cabeza de nuestro presidente Lucho y de nuestro vicepresidente David (Choquehuanca) es nuestro gobierno, un gobierno del MAS-IPSP, del pueblo, de las organizaciones sociales y trabajaremos de manera conjunta entre Órgano Ejecutivo y Legislativo para garantizar se cumpla el mandato que el pueblo nos dio en las calles y en las urnas en 2020”.
Acudieron a la cita también ratificaron su “militancia en el MAS-IPSP” y los “principios ideológicos revolucionarios antiimperialista, anticapitalista, antineoliberal, anticolonialista y antipatriarcal como políticos comprometidos con los intereses de nuestro pueblo y con la unidad del movimiento popular para seguir construyendo el vivir bien colectivo”.
En diferentes momentos el expresidente y jefe del MAS Evo Morales trató de distanciar a la sigla que llegó al poder del gobierno y en esta semana hizo pública una resolución que prohíbe a las autoridades electas como Arce participar de los congresos nacionales masista, lo que no solo fue rechazado por el Gobierno sino también por la misma estructura del MAS y diferentes organizaciones sociales.
El encuentro entre Arce, el gabinete de ministros de Estado y legisladores nacionales y supraestatales también se rechazó “todo intento interno y externo de desestabilización de nuestra democracia y de nuestro gobierno” y se aseguró que “el enemigo principal no se encuentra en nuestras filas sino en esa derecha fascista que no cesa en sus intentos de volver a tomar el poder por vías no democráticas para retornar a la república colonial y al modelo neoliberal de saqueo de nuestro Estado”.
En el documento se reafirmó la “lucha frontal” contra la corrupción y el narcotráfico “caiga quien caiga”, en alusión a los últimos hechos revelados y que son investigados con el resultado de varios detenidos como en el caso del envío de droga desde el aeropuerto de Viru Viru hasta España y la denuncia de corrupción contra el exministro Santos Cruz, quien se encuentra en la cárcel. El viernes se detuvo al viceministro Carmelo Valda.
“No permitiremos que por afanes políticos para desgastar la gestión de nuestro gobierno se nos pretenda etiquetar a todos como culpables de delitos que son personales y por lo que los responsables deben responder ante la justicia”, se aseguró en el documento que en lo administrativo acordó afianzar la coordinación entre el Ejecutivo y Legislativo.