Messi con la camiseta del PSG es un sueño que ya lleva varios años y parece estar más cerca que nunca de concretarse. Una última foto de Lionel con Neymar, Paredes, Di María y el italiano Verrati en Ibiza
Explota la bomba en España, retumba en Argentina y se expande por todo el mundo, oficial: Lionel Messi no seguirá jugando en Barcelona, lo anunció el club a través de un comunicado en el que aseguran que, pese a tener la renovación acordada con el futbolista, no podrán concretarla debido a "obstáculos económicos y estructurales".
Llega en el momento en el que todas las piezas parecían haber encajado para dejar atrás los fantasmas de la ruptura y rubricar la extensión del vínculo que permitiera transitar juntos la recta final de una carrera inolvidable en el club que lo cobijó cuando nadie hubiese imaginado lo que finalmente ocurrió, cuando ninguno sabía que Messi sería el mejor jugador del mundo y la figura más importante en la historia blaugrana.
Leo ya había pisado suelo catalán luego de sacarse la espina más grande de su carrera y levantar un trofeo con la camiseta de la Selección. Justo cuando su amigo Sergio Agüero lo esperaba dentro del plantel para dejar atrás los vaivenes recientes de un equipo que buscaba reciclarse. Cuando la relación con la dirigencia se había calmado con la llegada de Joan Laporta a la presidencia.
Pero si la despedida se da en modo de mazazo y con un frío comunicado de tres párrafos, hay cuestiones que exceden lo deportivo. Y hay preguntas que laten inmediatamente en el ambiente.
este jueves 5 de agosto, el club catalán anunció que Lionel Messi no seguirá en sus filas tras 20 años en la institución. De esta manera, los blaugranas le dicen adiós al mejor futbolista de toda su historia. Pero si los hinchas culés están tristes, la misma sensación estaría invadiendo al propio Messi.
Su salida del Barcelona se da cuando nadie la esperaba, tampoco Lionel. "Está en shock y muy triste", le confiaron a Clarín desde el entorno del ídolo. El motivo es el fatal desenlace que tuvieron las negociaciones que se dieron entre el club, La Liga y los Messi durante las últimas semanas. Un giro inesperado que siembra incertidumbre alrededor del futuro del mejor futbolista del mundo.
Según cuentan, el comunicado oficial que emitió el club fue redactado en conjunto con el futbolista, y se estaría analizando de qué manera Messi se despedirá de la afición culé. "Leo no va a expresarse en redes sociales, al menos por ahora", le contaron a Clarín desde España.
En estos momentos, el 10 de la Selección Argentina está "digiriendo" el final de su etapa como jugador del Barcelona. Es que más allá de lo futbolístico, dejar el club que lo vio nacer implica también cambiar de ciudad, el lugar donde vive junto a su familia, su esposa Antonela Roccuzzo y sus tres hijos: todo esto les implicaría un cambio de vida.
Según pudo averiguar Clarín, en el Paris Saint Germain ya estaban atentos a la posibilidad que LaLiga terminara bajándole el pulgar al acuerdo económico entre Barcelona y Messi. Y ya tenían preparada una propuesta concreta para que el crack rosarino siguiera su carrera en la capital francesa.
Messi con la camiseta del PSG es un sueño que ya lleva varios años y parece estar más cerca que nunca de concretarse. Una última foto de Lionel con Neymar, Paredes, Di María y el italiano Verrati en Ibiza confirma que al 10 de la Selección Argentina le esperaría un vestuario en el que se sentiría más que cómodo.
De acuerdo al relato de quienes lo conocen, Lionel quedó realmente afectado por lo que pasó en las últimas horas. La vuelta de sus vacaciones por Estados Unidos e Ibiza lo mostraban expectante por ponerle rúbrica a su nuevo contrato con el Barcelona, del que ya se conocían cifras y plazos, con su actividad hasta el año 2024.
Pero este jueves su realidad hizo un giro de 180 grados. Messi esperaba que lo llamaran para confirmarle que estaba todo hecho pero la comunicación terminó dándole la peor de las alternativas: desde el club le informaron que no podrían inscribirle debido a las restricciones de La Liga en los términos del llamado "fair play financiero".